Ebookeando en la nieve

Territorio Ebook

Si se fijan bien, tal vez puedan descubrir alguna grosería de estudiante

(Aviso: spoilers) Consultado un especialista contemporáneo de vuesas mercedes sobre el vítor, nos envía este texto sobre este asunto (que los ebookeadores me hacen llegar con el mandado de dejarlo escrito aquí, mandado que hago y ejecuto en el acto).

La escritura en vítor, por José Antonio Sánchez Paso

Todos los que somos del entorno salmantino conocemos bien lo que son los vítores, ese anagrama escrito sobre la pared de algún edificio noble, preferentemente universitario, en el que el término latino vitor, acompañado de un nombre y una fecha, resume la felicidad del que ha alcanzado la condición de doctor, tras dura pugna por domeñar una investigación, un tribunal y un tiempo tasado.

Las paredes de los edificios universitarios están llenas de ellos, pero también a poco que se fije uno se pueden ver en las de la catedral, las de iglesias y conventos, las de palacios y edificios oficiales.

De un tiempo a esta parte la vieja escritura con almagre se ha extendido más allá del reducto universitario y de la función de broche doctoral. Así, no solo crece su presencia en los interiores y exteriores de cada nuevo edificio universitario, sino que se ha vuelto costumbre de exquisita elegancia rotular nombres de calles, de edificios, de comercios y de todo lo que sea menester con esta manera epigráfica de decir mucho con pocas palabras. Pocas ciudades pueden presumir de tener, como Salamanca, una tipografía propia, que incluso ahora goza de diseño digital y se usa de forma ornamental en sitios web, blogs y documentos informatizados, como practica la propia universidad salmantina. Pocas ciudades pueden presumir de tener, como Salamanca, un motivo patrimonial en la escritura epigráfica: miramos con admiración sus muros, sí, pero también los leemos: igual que miramos pero no entendemos la fachada de las Escuelas Mayores, leemos sin entender la roja escritura que manos anónimas escribieron sobre las paredes del Patio de Escuelas.

Tomo el asunto como motivo de reflexión y metáfora sobre las viejas y las nuevas escrituras y sus soportes: al tiempo que el ojo avezado a mirar y leer descubre que los viejos vítores del siglo XVIII van palideciendo y la inclemencia del tiempo los va borrando, se ven otros epigramas que sin ser vítores se escriben con su misma tipografía, se estampan sobre metacrilato y otros materiales resistentes, se llevan a los muros interiores de los nobles edificios y simulan ser herederos de una vieja tradición. Mientras el reino digital ha expandido y glorificado la presencia y los usos de la tipografía vítor, el viejo manuscrito de piedra donde comenzó a escribirse la tradición pierde brillo y lectores.

27 de febrero de 2011

Los vítores y los naipes, fueron nuestros libros en los primeros cinco capítulos. En éstos que siguen (del 6 al 12), gusto de averiguar en qué otros lugares y en qué otros libros se leía. Las paredes no sólo atesoraban vítores. Hay estancias que se nombran. No digo más, por no merecer fama de poco prudente. Como si estuviésemos ante una mesa de juego inocente: ¡les toca!

¿Quién será su autor?

P. S. Jesús Plaza envía esta imagen/mensaje que alguien plasmó en los muros del Albaicín. Gracioso, ¿verdad?

30 comentarios

  1. Centro de Desarrollo Sociocultural dice:

    Gracias, en nombre de todos los que trabajamos en el proyecto Territorio Ebook, por tu escrito, José Antonio. Este es un lienzo que está siempre disponible para tus palabras. Un abrazo.

    • JASP dice:

      Siempre hay algo nuevo que decir que no aprendió de alguien que se lo dijo, y es bueno que haya lienzos en los que seguir pasando la bola, o la pluma (¿el teclado?), a los que quieren oír, ver y descubrir.

  2. Raquel dice:

    Creo recordar que en la fachada de cierta casa aparecía un símbolo que representaba a la familia que en ella habitaba. ¿Sabéis de que estoy hablando?

  3. Raquel dice:

    Como dice Jambrina “las ciudades son novelas”, y como tal hay que leerlas para descubrir que se esconde en cada calle, plaza o rincón.
    Seguro que todos conocemos la Plaza de la Concordia, pero ¿alguno sabría decir por qué lleva este nombre?

    • jota dice:

      No se que respuesta será la óptima:
      Plaza de la Concordia es la que han hecho junto al Corte Ingles, parece que en homenaje al los valores de tolerancia que representa (o eso se supone) una ciudad de estudio como Salamanca.
      He visto en el callejero una Plaza de la Concordia cerca de la iglesia de San Juan de Sahagún.
      También hay una casa de la concordia, al final de la calle de San Pablo (casa que antes se llamó, curiosamente, de las batallas). Parece que en ella se firmó, con la mediación de san Juan de Sahagún, la concordia de 1479 entre los dos bandos enfrentados. Ahora es una moderna residencia de estudiantes y, de la casa original, sólo queda un arco con una inscripción en latín que dice “La ira genera odio, mientras que la concordia se nutre del amor”.
      ¡Será por concordia…!

      • jota dice:

        ¡Ah!, también hay una Calle Concordia en el Alto del Rollo.
        ¡sufridos carteros…!

        • Raquel dice:

          Muy bien Jota, me refería a la casa que tú nombras en la cual se firmó el primer pacto de paz pero creo que fue el último día de septiembre de 1976. A partir de ese momento pasó a llamarse Plaza de la Concordia.

          • jota dice:

            Sí, Raquel, tienes razón (aunque se te haya colado un nueve donde debería ir el cuatro). La Concordia se firmó el 30 de septiembre de 1476 (y no 1479, como yo había dicho)
            Mis disculpas.

  4. Luisa dice:

    Estoy algo confundida. Esa imagen que alguien ha puesto tras lo que escribí, ¿es a lo que se refería jota? ¿Es eso, jota?

    Las casas y las calles cuentan secretos para quien sepa leerlos, damas, caballeros.

    • Jambrina dice:

      Querido José Antonio, gracias y enhorabuena por ese texto sobre el vítor. Precisamente ayer, en una pausa entre clases, me paseaba yo por el patio del Palacio de Anaya y me topé con tu propio vítor, que está al lado de la puerta trasera del edificio (el mío está en un lateral). Mira qué casualidad. Como está escrito sobre la piedra de un edificio histórico, durará mucho más que nosotros. Supongo que dentro de cien años los turistas seguirán sacándoles fotos y preguntando a quien pase por allí que quiénes son esas personas cuyos nombres figuran al lado de esos signos tan extraños.

      • tentenecio dice:

        Pues como pilla cerca la C/ Tentenecio del Palacio de Anaya me paso un dia y hago una foto de los vítores de los dos doctores y los subo al blog

      • JASP dice:

        Vaya por Dios, Luis, me has descubierto el garabato en el claustro de Anaya. En buena lid, tendré que matarte para que no lo vayas contando por ahí o me saques de mantista en alguna novela. Por cierto, para quien tenga ganas de curiosear las paredes del patio de escuelas: ¿son todos los vítores de color rojo?

    • Centro de Desarrollo Sociocultural dice:

      Querida Luisa: efectivamente, la pusimos nosotros, después de que Jesús la enviase por correo electrónico. Ahora, no sabemos si Jesús Plaza es jota o no. Eso, lo tendrá que decir el o ellos ;-)

      Un abrazo

  5. Raquel dice:

    Ya que estamos leyendo la ciudad, ¿alguien sabe qué historia esconde la fachada de la universidad? ¿como podemos leer dicha fachada? ¿a quién fue dedicada su construcción?

    A ver si entre todos podemos recopilar toda la información.
    Besos

    • jota dice:

      ¡Uf!, si que es compleja la cuestión y diversas las opiniones e interpretaciones.

      Algunos, como el arquitecto Pablo Andrés Bravo (un apasionado por el arte) en un precioso libro que se llama “Portae Lucis”, construyen un complejo tratado sobre proporciones, interpretaciones comunes sobre la “doble personalidad” de los personajes que aparecen labrados en la piedra así como otras, menos comunes, sobre el posible significado cabalístico oculto mezclado con las doctrinas del neoplatonismo. Especula sobre fechas y posibles autores del diseño y de la construcción.
      Es un libro difícil y hermoso en el que, por ejemplo, podemos ver laminas del hombre de Vitrubio, el templo de Salomón, la música de las esferas o el árbol sefirótico de la cábala judía, superpuestas en perfecta proporción sobre la fachada.

      Otro librito, ya clásico y más sencillo, es el escrito por Cirilo Florez Miguel sobre la fachada y que edita la Universidad de Salamanca. O el escrito por Paulette Gabaudan (misma editora)sobre la iconografía renacentista de la Universidad.

      Y hay muchos más…

      ¡Enfín!, cualquier lectura se presta a la interpretación, y no iba a ser menos la lectura de esta maravillosa fachada estandarte.

      Y se me ocurre que, con la ayuda de un libro guía, lo mejor es leerla poco a poco en directo o, si no hay más remedio, en una buena foto de alta definición (que las hay)

      • Raquel dice:

        Hola Jota, tienes razón la custión es un poco complicada de resumir, pero a grandes rasgos podemos decir qué está dividida en tres cuerpos. El primero contiene el medallón de los Reyes Católicos que empuñan el mismo centro, y sobre sus cabezas el yugo de Fernando y las flechas de Isabel. El segundo cuerpo contiene en el centro el escudo de Carlos V, rematado con un globo y una cruz sobre una espectacular corona; a la derecha el águila de San Juan y de los Reyes Católicos, a la izquierda el águila bicéfala del Imperio. En el tercer cuerpo hay una capillita donde se halla Papa Benedicto XIII que exhorta los clérigos.

        Seguro que tú tienes mas información sobre este tema.

        Un saludo

        • Luisa dice:

          Qué parlamento tan enjundioso. Jota, me tiene admirada. Tan pronto sabe de este siglo como de los precedentes, de libros en piedra y de ebooks.

          ¿Y vos, dulce damisela? Tiene una mente despierta y ágil, por lo que leo.

          Tengo entendido que, en nuestros días, gentes que llegan de diferentes sitios acuden a observar esta hermosa fachada ¡y sólo ven, tras arduos esfuerzos, un pedazo de ella! ¿Saben algo de ésto?

    • JASP dice:

      Hace unos años quise editar un libro que contara qué era lo que se veía en la fachada del edificio de las Escuelas Mayores, así que convoqué a varios especialistas para hacerlo en el Servicio de Publicaciones. El resultado fue sorprendente: había tantas teorías e interpretaciones distintas (efectivamente, en este lienzo se han citado algunas, pero hay más) que el libro hubiera adquirido la condición académica de tocho, además de contradictorio. Así que desistí. Mejor así: que siga siendo un misterio y permita que cada cual vea lo que le apetezca. Como el Guernica de Picasso.

  6. Cecilia dice:

    Croac, croac…

    (Esto pretende ser una rana…)

    Que lo explique xota, que lo hace muy bien.

    • xota dice:

      Para mi que sí es batracio más… ¿Seguro que es rana…? En cualquier caso… ¿Porqué asienta sus reales sobre una calavera?.

      Ánimo y a mojarse. Que estamos bien avenidos, pero pocos hablamos a riesgo de acabar aburriendo y aburriendonos.

      • Raquel dice:

        Según tengo entendido la rana sobre la calavera simboliza la lujuria.

        Dijo Unamuno “no es malo que la miren las gentes, sino que solo la miren a ella, olvidando los esplendores y bellezas de tan prodigiosa fachada”.

        ¿Y qué os parece el otro animal que aparece en la fachada.

  7. jota dice:

    La fachada

    En el primer cuerpo, debajo del medallón de los reyes (y la leyenda “los reyes a la universidad, la Universidad a los reyes) hay una pequeña figura que algunos identifican con Cronos.
    En el segundo cuerpo, lado izquierdo, medallón con la figura de Carlos I (o Hercules). En el lado derecho, medallón con la figura de Isabel de Portugal (o Hebe)
    Por encima, lado izquierdo dos veneras (conchas) con las figuras de Jasón y Medea y en el derecho otras dos con las figuras de de Escipión y Alejandro Magno (o Anibal).

    Seguiremos leyendo…

  8. Raquel dice:

    Y siguiendo con los lugares en los que podemos leer, ¿Os acordáis de cuando Rojas va a la casa de Diego de Medrano(tío de Luisa)? ¿Qué se encuentra en el salón que le llama la atención?

    A refrescar la memoria…

  9. Cecilia dice:

    Los tapices, que si se miraban deprisa y moviendo la cabeza adquirían movimiento, como una película de cine de la época.

    Si es que está todo inventao!

  10. Cecilia dice:

    Ah perdón, es que se me han descontrolado los tiempos. Claro, que hoy todavía hay talleres. Lo ziento.

  11. Luisa dice:

    Efectivamente, dama, caballero. Los tapices que estaban en casa de mi tío. Pero: ¿qué representaban?

    Sigamos leyendo, pues la fachada de la Universidad, interpretándola a nuestro modo y manera, JASP, Jota. Y entonces, la rana sobre el cráneo qué será: ¿locura o lujuria?
    No quiero dejar pasar ocasión para lanzarles otra pregunta.
    En mis tiempos, caminando por las calles, solamente con observar ropajes podíamos saber la condición del que los llevaba (si es que no era moza disfrazada de varón o fullero vestido de caballero). Esto es, podíamos “leer” en las vestiduras.
    ¿A qué me refiero?

    • jota (de gitanillo del patio de escuelas) dice:

      - ¡Ay, señora… ! ¿l’essplico lo de la rana…?
      Pa unos es la firma del autor, para otros la ujuria que yeva a la muerte; pa unos es una rana, pa otros es un sapo. Y si usté cree que solo hay una rana, pues acerquese a la puerta, que hay un montón.

      S’incuentra la rana se le cumple un deseo, aprueba los esamenes, y vuelve a Salamanca.

      ¡Toma ya! y sin despeinarse. Y todo por el módico precio de la voluntad y un fuelle de postales, más o menos actualizadas, de Salamanca. ¡Ojo! algunos han aprendido (y eso requiere buen oido, interes y memoria) incluso datos (que a veces se mezclan) de fechas, nombres, otros relieves de la fachada… ¡Qué ingenio!

      Cada vez escasean más los que “esplican”, aunque sigue habiendo de los que venden postales.

  12. Luisa dice:

    Jota, xota o jota de gitanillo del patio de escuelas. Ya he dicho que vos me admirais.

    Cierto es. Rana o sapo, sapo o rana. ¿Vos va mucho a contemplarla?

  13. jota dice:

    También se escribía de los bandos en coplas como ésta que he encontrado por ahí

    Todo son armas, todo espantos,
    afrentas, voces, injurias,
    venganzas, asombros, furias,
    heridas, muertes y llantos.
    **********
    A San Benito venían
    los Manzanos orgullosos
    y los Monroyes briosos
    a Santo Tomé acudían.
    Cada cual con su divisa,
    el sitio amigo conserva
    y en la plaza nace yerba,
    porque ninguno la pisa.

  14. Centro de Desarrollo Sociocultural dice:

    Continuamos en otra entrada, indagando otros soportes y otros lugares. Gracias a todos.