Hay noticias que saltan en la red y son casi imparables. Uno de los mayores expertos en usabilidad, Jakob Nilsen, ha realizado una investigación sobre la velocidad de lectura en 4 soportes, concluyendo que es la lectura en papel la más rápida. ¿Ves cómo el libro electrónico no tiene futuro?, se lee mucho más lento que en el de papel; puede ser la conclusión apodíctica de algún presidente de libreros de cualquier ciudad del mundo. Pero al final, si empiezas a profundizar, hay asuntos que dan para hablar, comentar y discutir, tanto a nivel científico como de calle.

Y eso es lo que proponemos.

Para empezar, Joaquín Rodríguez, colaborador de Territorio Ebook, publicó una interesante entrada en su blog Los futuros del libro, en la que habla de las no interferencias tipográficas en la legibilidad de los textos; aquí se abre un primer frente de debate.

La segunda reflexión es que, dados los resultados de la investigación dirigida por Jakob Nielsen, y siendo el libro en papel el mejor colocado en cuanto a velocidad de lectura, Joaquín se pregunta “si existe una disimilitud esencial entre los soportes, y si ésta tiene arreglo con mejoras técnicas o persistirá para siempre”. Ya tenemos un segundo frente de debate.

Podemos preguntarnos qué importancia tiene la velocidad en el acto de leer. Seguramente, para un estudiante o un profesor universitario puede tener mucha, pero para una persona que participa en un club de lectura, para quien leer está asociado al placer y a la comodidad, quizás no tanto. Tal vez prefiera un 10% menos de velocidad pero leer a gusto (por ejemplo, en la cama) con su dispositivo de lectura electrónica, como están demostrando las primeras investigaciones del Proyecto Territorio Ebook . Y qué papel juega la comprensión si la asociamos con la velocidad: ¿se trata de una relación directa o inversamente proporcional?; igual prefiero menor velocidad para ganar en comprensión.

Por otro lado, cuánto tiempo llevamos leyendo en papel y cuánto tiempo se lleva leyendo en pantalla, sobre todo, en la del Ipad o en la del Kindle. ¿Influye, de manera decisiva, en la velocidad de la lectura y en la comprensión el contenido y el lugar donde se esté leyendo, además del dispositivo de lectura? Podemos, incluso, hacernos un auto diagnóstico de la rapidez con la que leemos en la pantalla del ordenador.

En fin, que desde Territorio Ebook nos gustaría que nuestros colaboradores próximos o lejanos debatieran sobre este asunto; si es posible, se hicieran más preguntas y que alguien nos dé alguna respuesta. Aunque las mejores respuestas vendrán de los lectores, porque son los que, al final, dotan de significado a los soportes, sean éstos más o menos veloces. Y tipos de lectores hay muchos.

Podéis dejar vuestros comentarios en el siguiente blog:
http://www.territorioebook.com/jambrina/blog/?p=194